La ZONA y tu CEREBRO

La ZONA y el rendimiento cerebral

¿Constantemente te sientes triste, con pensamientos pesimistas, o deprimido, sueles comenzar una tarea y te cuesta terminarla, te falta concentración, olvidas las cosas con frecuencia, no eres estable en tus emociones, has perdido esa sensación de bienestar en la vida, a menudo te encuentras saturado mentalmente, te comportas intolerante en tus relaciones con los demás, sientes constante ansiedad por comer alimentos chatarra y tomar bebidas ricas en azúcar?

Pues debes saber que estos procesos se llevan a cabo en TU CEREBRO!  Y la dieta de la zona puede ayudarte a evitar todo esto.

A  pesar de que el cerebro representa solo el 2% de nuestro volumen corporal, el cuerpo destina el 25% del total del volumen sanguíneo para este órgano.  Ahora entenderás porqué es importante que el cerebro reciba suficiente  flujo sanguíneo durante toda la vida para su adecuado  funcionamiento en todas las edades y para evitar su pronto deterioro.

La sangre que va al cerebro, entre otras cosas, transporta el oxígeno que necesita para formar las famosas partículas de ATP (Adenosin Trifosfato) necesarias para formar la energía cerebral, sin ella nos sentimos desenfocados, desmotivados, apáticos, intolerantes, irritables, faltos de memoria y de concentración.

La buena noticia es que lo primero que mejora dramáticamente el flujo de sangre al cerebro son unas sustancias muy poderosas descubiertas por científicos ganadores del Premio Nobel de Medicina en 1982.  Estos investigadores provenientes de Suecia e Inglaterra descubrieron las hormonas más poderosas descubiertas hasta el día de hoy: los “eicosanoides” estas súper hormonas rigen toda la fisiología humana controlando y produciendo más hormonas y controlando nuestro flujo de sangre al cerebro. 

El Omega 3 de origen animal extraído del pescado, principalmente el EPA, aumenta de manera natural estos eicosanoides buenos durante toda tu vida, es por eso que hay que consumir un poco de Omega 3 todos los días para llenar a nuestro cerebro de esas moléculas de ATP y  prender la pila de energía, alegría, enfoque y saciedad. Este es uno de los maravillosos efectos de esta grasa esencial Omega 3 que el cuerpo no puede producir por sí mismo y que es sumamente necesario para que pueda realizar todas sus funciones vitales.   

Un requisito para tener una VIDA FELIZ es tener un CEREBRO SANO, 

es decir, UN CEREBRO EN LA ZONA.

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Con mis mejores deseos para esta semana, 

Tu nutrióloga en Monterrey

Beatriz Almaguer